Hoy os queremos compartir, un artículo que ha escrito uno de nuestros alumnos, Iván Carretero.
Tras pasar por la Escuela Superior de Enoturismo, ha percibido la importancia que tiene la formación en el sector, lo exigente que es el público a la hora de visitar una bodega y lo que buscan en esta experiencia… conocer, disfrutar y, sobre todo, divertirse.
Nuestra Escuela pretende formar profesionales del enoturismo, impartiendo conocimientos tan importantes en materias como “el terruño”, fases de elaboración de la uva, clasificación de vinos, iniciación a cata, … pero también otras, igual de importante como, el guion de una visita enoturística, técnicas de comunicación, el perfil del Enoturista, organización de eventos o las últimas tendencias en enoturismo.
Todo esto lo podéis encontrar en nuestros cursos más especializados. Si os entra el gusanillo del enoturismo, leyendo el artículo de Iván, nuestro curso de Experto en Enoturismo es perfecto para vosotros.
Artículo de Iván Carretero González
Eno turismo
La ruta Ribera del Duero se alza como unas de las tres rutas del vino más visitadas en España. Acompañada de la ruta de Jerez, y la del Penedés Catalán. Desde el año 2010 se ha triplicado el número de visitantes, y esto no es sólo porque hay un público interesado en este producto, sino además porque cada vez más empresas apuestan por este servicio.
El turismo conforma un 12% del PIB, y las ventas de vino y mosto han alcanzado según el INE los 5,5 millones de euros este pasado año. Aunque España se nutre mucho del turismo internacional, en el caso del enoturismo no es así. El 74% del público es nacional, con tan sólo un 26% internacional. Y normalmente son parejas de entre 35 y 45 años.
Es importante que las bodegas empiecen a comprender mejor el sentido de enoturismo. En esta palabra el vino sólo contiene tres letras, mientras en el resto pertenecen a turismo. Con eso quiero explicar que la finalidad de la visita es entretener al turista. El turista no quiere ver otra vez depósitos de acero inoxidable que ha podido ver en cantidad de bodegas. El visitante quiere distraerse, por eso hace turismo.
El nuevo reto de las bodegas es apostar por un turismo más especializado, y saber adaptarse al público. No puedes tener una sola visita. Hay que tener una más familiar para que los niños lo encuentren atractivo, una más especializada para gente ya culturizada en este mundo, y por último una más general para todo tipo de públicos.
Como guía enoturístico que soy, sé que es difícil adaptarse, pues es un mercado que todavía no está del todo explotado. Pero tenemos que apostar por él. Los romanos entendían mejor que nosotros el significado del vino, el vino, aparte de cultura, es diversión, amigos y entretenimiento. Y son estas tres últimas palabras con las que todo guía como yo tenemos que quedarnos.
¿Qué os ha parecido?, ¿estáis de acuerdo?